PELOTA CUBANA. CON JUAN EMILIO BATISTA

Sin definir clasificados en el béisbol Sub-23, cuando restan solo cuatro duelos

Por Juan E. Batista Cruz

Las Tunas, Cuba.- Después de que los noveles azucareros no pudieron con los pichones de cocodrilos en su visita a Matanzas, los duelos finales del calendario clasificatorio decidirán los cuatro equipos que pasan a la postemporada del campeonato nacional de béisbol, categoría Sub-23.

El caso es que los “fantitos” de Cienfuegos aprovecharon su visita a Mayabeque y con un partido menos jugado, se situaron a 3,5 rayas de Villa Clara, líder del grupo B, a quienes se enfrentarán cuatro veces a partir de este viernes en el estadio Augusto César Sandino de Villa Clara.

En el grupo A, Artemisa recibirá a Pinar del Río y aunque parece seguro clasificado por su ventaja de tres rayas sobre los habaneros, habrá que esperar porque los leoncitos azules enfrentarán cuatro veces a los bisoños piratas de la Isla de la Juventud y pudieran aprovechar la condición de anfitriones en su afán de igualar en la cima. Es difícil, pero no imposible.

Candentes están los grupos C y D. En el primero, los tigrecitos de Ciego de Ávila tienen ventaja de una raya sobre Camagüey y dos en relación con Sancti Spíritus. Los rayadillos visitarán a los gallitos, en tanto los toretes de Luis Ulacia serán anfitriones de los “hacheros” de Las Tunas; son favoritos, pero ojo con los eliminados que como se sabe no tienen presión. Santiago en la segunda llave oriental aventaja a Granma en un juego, los dos deben imponerse a sus rivales de turno, Guantánamo y Holguín; pero al que se confíe lo “puede coger la rueda”

Lo cierto es que estamos en presencia de una final de foto-finish en la fase clasificatoria de esta tercera versión del béisbol Sub-23 en Cuba. De acuerdo con lo visto y acostumbrado como estoy de ofrecer mi pronóstico, voto por Artemisa, Villa Clara, Ciego de Ávila y Santiago de Cuba para animar la postemporada.

Al comenzar el último programa clasificatorio, el bateo general se mantiene bajo con average de 257, liderado por Santiago (294), la defensa es paupérrima, 965 y la menos mala es la de Camagüey (975), en tanto la efectividad del pitcheo es aceptable al compilar para 3,44, formidable en el caso de Villa Clara (2,50)

Próximo al momento del adiós, este torneo, en el que deben desempeñarse los principales talentos de la pelota cubana, con vistas al futuro de la selección nacional, se observan muchas lagunas: Imperdonables errores físicos y mentales tanto a la defensa como a la ofensiva, los casi nulos intentos de robar bases, la falta de potencia en los brazos de los jardineros, el descontrol de los lanzadores y otras carencias en jugadores que vienen desde la base de la pirámide de alto rendimiento, procedentes de las academias en las categorías, pioneril, escolar y juvenil.

No es un secreto para nadie conocedor del béisbol en este mundo, que es Cuba uno de los países de mayor tradición y fuerza con casi siglo y medio de práctica sistemática, pero aquellos que lo siguen saben, también, que por diferentes razones, hemos retrocedido y urge adoptar las medidas que sean necesarias, para rescatar este Patrimonio Nacional, esta parte tan importante de Cubanía, de Identidad de la Mayor de Las Antillas.  

PEQUEÑAS AVISPAS, ¡DE LÍDERES!

Por Juan E. Batista Cruz.

Las Tunas, Cuba.- Las  pequeñas avispas de Santiago, aprovecharon bien el fin de semana como anfitrionas frente a Guantánamo y se encaramaron en la cima de la Serie Nacional de Béisbol, categoría Sub-23, al término de los sextos duelos particulares de la etapa clasificatoria.

Los representantes de uno de los territorios con más historia en la pelota cubana, han logrado conjugar armónicamente la ofensiva, la defensa y el pitcheo, por lo que su rendimiento integral los convierte en favoritos, no solo para clasificar a la postemporada, sino que están en condiciones de luchar por el banderín hasta el juego final.

Santiago tiene ahora balance de 16-8, aunque es seguido de cerca por Villa Clara y Camagüey que suman 15, Artemisa y Ciego de Ávila, estos dos últimos con 14, todos de capacidad potencial suficiente para producir un vuelco en la tabla en la recta final del calendario.

Hay equipos caracterizados por un quehacer tambaleante, sin estabilidad en su rendimiento y, el mejor ejemplo es el de Las Tunas que, luego de arrancar mal acusó cierta mejoría, sobre todo cuando en visita a Ciego a Ciego de Ávila, líder en aquel momento, se apareció con tres triunfos al hilo que lo metieron en la pelea, para después llegar a su cuartel  general donde, inexplicablemente, fue barrido por Camagüey en cuatro choques.

De momento, estoy seguro de la eliminación absoluta de los planteles de Guantánamo, Las Tunas, Pinar del Río y Matanzas, situación que sorprende en los dos últimos, representantes de territorios con una bonita historia en los casi 150 años del béisbol en Cuba.

Ha mejorado la ofensiva en general y el pitcheo mantiene un rendimiento estable, aunque con el problema, al parecer crónico, de la falta de control. Punto y aparte para la defensa, tan pobre que pinta a caso perdido, algo fatal en el béisbol de cualquier liga del mundo en la actualidad.

Este martes comienzan nuevos duelos, en los cuales son mis favoritos Isla de la Juventud, Cienfuegos y Camagüey, que reciben en sus estadios a Pinar del Río, Matanzas y Ciego de Ávila, además de Artemisa, Villa Clara, Sancti Spíritus, Santiago y Granma, pese a ser visitadores frente a La Habana, Mayabeque,  Las Tunas, Holguín y Guantánamo. 

No parece que pueda haber cambios notorios en la tabla general de posiciones, pero de todas formas, Santiago no podrá aflojar en su visita a Holguín, porque éste es un conjunto que juega muy bien en casa y Villa Clara y Camagüey están pisándole los talones, a solo una raya.  

30 Y FINAL: BECERRIL FERNÁNDEZ

Por Cesáreo Suárez Naranjo

(Capítulo 30)

Causó expectación, en muchos aficionados, el retorno de MIGUEL "BECERRIL" FERNÁNDEZ al beisbol. Bastante más embarnecido, ¡eso si!, pero no pocos pensaron: "¡no hace falta que ya no sea tan ligero!, es suficiente con que "enganche" bien la pelota; y, con esos músculos ¡va pa'fuera!!".

Narraremos, brevemente, algunos momentos de esa campaña de 1974. Para la tercera serie del rol de juegos, se presentaron los "Diablos Rojos" en el "BEISBORAMA" con su nuevo manager, el gran "Pelón Mágico" Benjamín "Cananea" Reyes (contratado desde el 15 de enero por Ángel Vázquez) para llevar a cabo una serie de cuatro encuentros, a partir del lunes 25 de marzo.

Y, "cuenta la historia" que desde ese mismo momento comenzó la gran rivalidad, ya no digamos entre estos dos equipos: "pingos" y "Cafeteros" sino, también, entre los aficionados de Córdoba y "Cananea".

Era tanto el "cariño" que se tenían, que Benjamín rebautizó al estadio con el nombre de "Cannibal Park" (¡qué tiempos, aquellos!).

 Y a pesar de que los Cafeteros ya habían debutado, a partir del segundo partido de la serie, al dominicano Rico Carty (precedido de grandes antecedentes en las Mayores) los odiados "infernales" se llevaron la confrontación tres partidos a uno.

La batalla entre estos dos equipos continuó en el parque del Seguro Social; y, allí, los "ahijados" de Cananea le "repitieron la dosis" a la gente del Toche Peláez. Hasta aquí nos es posible hacer una breve crónica detallada.

Chara Mansur siguió trayendo peloteros que ya habían jugado en el Gran Circo. A principios de abril se les unió el lanzador portorriqueño Juan Pizarro y, más adelante - el 12 de Mayo - llegó el venezolano Vic Davalillo. Fue el 8 de Julio cuando los Cafeteros adquirieron, de los Tigres del México, al gran tercera base Celerino SÁNCHEZ quien en las dos temporadas anteriores había estado con los Yankees.

No habían andado tan mal en el standing; pero el primero de junio el Toche dejó las "riendas" del equipo, y fue reemplazado por su "brazo derecho", el hombre del "Santuario": Alberto Joachín.

Desafortunadamente, a 42 años de esta historia, desconocemos en qué momento BECERRIL salió del equipo. El caso es que ni siquiera jugó la mitad de la temporada, cayendo la responsabilidad - para el puesto de "BD" - entre Carty, Davalillo y, a veces, en el mismo "Terín" Pizarro.

Los Cafeteros, eventualmente, calificaron para los play-offs, al terminar en el segundo sitio de su división. Pero fueron derrotados, en cuatro juegos seguidos, por los Charros de Jalisco.

En esta, su última incursión en el beisbol "grande", BECERRIL apareció únicamente en 21 partidos, con 46 veces al bat y 9 imparables, para un bajísimo promedio de .196, con 3 dobletes, 3 carreras anotadas y 4 producidas.

Ello marcó, tristemente, el adiós definitivo de un gran pelotero, que tuvo TODO; y que siempre mereció elogios por su inmensa habilidad para jugar beisbol.

Al que muchos consideraron "fuera de serie"; y que, de haber QUERIDO, pudo haberse remontado a las alturas que están reservadas para los "grandes".

Pero BECERRIL tenía un carácter "muy especial", que quedó plenamente demostrado en no pocas ocasiones, empezando con aquella "lejana primavera" de 1956 en la que, después de haber recibido los reportes entusiasmados del buscador Howard Hack, la organización de los Piratas - encabezada por el "Mahatma" Branch Rickey - lo enviaba, para que madurase, al equipo sucursal de los Tigres en la Liga Central, negándose a reportar.

Ese mismo carácter "disparejo" le impidió, también, quedarse tanto en 1958 y 1959 en buenos equipos de Triple "A", como lo eran el Columbus y los Habana Sugar Kings. ¡Lástima!

Y esto nos obliga a hacer varias consideraciones. Porque, por muchos, ha sido calificado como el "pelotero con más facultades", surgido en nuestro beisbol.

Una de las mejores alabanzas que pude encontrar la resume el reconocido cronista Tomás Morales Fernández en su libro "Los Diez Campeonatos de los Diablos", publicado en 1990: "MIGUEL BECERRIL FERNÁNDEZ, el sensacional jugador..al que muchos consideran como el jugador mexicano MÁS COMPLETO DE TODOS LOS TIEMPOS...dio temporadas excelentes, jugando con el México...".

Hemos de señalar que, en esto de "El más Completo", algunos dicen que fue Matías Carrillo. La verdad que cada quien "tuvo lo suyo". En el caso de MIGUELÓN su tremendo poder por ambos lados del plato, y su gran versatilidad para jugar cualquier posición (si exceptuamos pitcher y catcher).

En cuanto al "Coyote", acumuló mejores cifras que él, en nuestro circuito (fuera de los triples); y, además, estuvo en "las Mayores". Entonces, ¿usted, que opina? Por lo que a mí respecta, el hecho de que esté escribiendo esta "historia" lo dice todo.

Alberto Joachín.

Pero, si, debo aclarar - en el caso de BECERRIL - que quedó "mucho a deber". Porque podríamos considerarlo - o no - como un "jugador de cinco herramientas" (a five-tools player), que bateaba, y corría y fildeaba con excelencia. Pero, ¿qué tanto?

Y no es que ahora me quiera meter en una disertación de carácter filosófica. Pero el alemán Emmanuel Kant estableció una teoría - con tres parámetros - para estimar el valor de una persona, a través de la antropología.

La primera, "la teórica, para conocer las FACULTADES de un individuo; la segunda: la pragmática, para saber de las HABILIDADES de esa persona". En esas dos primeras BECERRIL califica "EXCELENTE".

Pero, en "la tercera consideración" ya no tanto, pues se refiere a "la MENTALIDAD del individuo y, en consecuencia, al aprovechamiento óptimo de las dos primeras cualidades". Y, aquí, ya no se puede hablar "muy bien" de él. Reiteramos: "nos quedó a deber". Pero, más que a nosotros, "se quedó a deber a SI MISMO".

Miren ustedes si lo podemos considerar como un auténtico "five-tools player" comprendiendo, en esto: 1.- Batear para "porcentaje"; 2.- Batear con poder; 3.- correr; 4.- "buen brazo"; y 5.- Habilidad defensiva.

Chara Mansur, Jesús A. Rubio y Ramón Arano en el Beisborama.

Para poder hacer una evaluación "aproximada", vamos a ver los numeritos que acumuló durante su carrera (especialmente los de la Liga Mexicana); y ver, inmediatamente después, a qué "alturas volaba", al momento preciso de su retiro, en comparación con otros peloteros "de antes, y de entonces".

Apareció en 1524 partidos, con 5288 turnos al bat en los cuales consiguió 1520 hits, de ellos 305 dobles, 93 triples, 185 cuadrangulares - 9 de ellos con casa llena; 887 carreras anotadas y 909 producidas; añadiendo a ello 77 bases robadas, con un porcentaje de .287.

Ahora bien: en imparables ocupaba entonces el lugar 14; en dobles el cuarto; en triples el primero - recordando que mantuvo la marca, hasta que la rompió Gonzalo Villalobos; en jonrones el sexto, manteniendo el primer lugar en grand slams, hasta ser superado por Nelson Barrera; y en carreras producidas el sexto, en tanto que en robos el 40.

De sus actuaciones en la Liga de la Costa tenemos lo siguiente: jugó en 462 partidos, con 1611 veces legales en las que conectó 448 incogibles, de ellos 78 dobles, 19 triples y 71 palos de vuelta entera; robándose 30 bases y produciendo 243 carreras, con un un promedio de .271. Recibiendo, además, 225 pasaportes gratis.

En reconocimiento a sus méritos, MIGUEL "BECERRIL" FERNÁNDEZ RAMÓN fue electo para ingresar al Salón de la Fama en 1984.

Ha sido TODO sobre este gran personaje, orgullo no sólo de nuestra región o nuestro estado, sino del país entero, quien se pasaba su existencia entre su natal Las Choapas y la bellísima Puebla "de los Ángeles", a la que le tomó un inmenso cariño, enterándonos con tristeza que fue ahí, en la "Angelópolis" donde ocurrió su fallecimiento, el sábado 24 de septiembre de 2005.

!Siempre te recordaremos, MIGUELÓN!

P.D. Con las implicaciones que tienen las "categorizaciones" en nuestra forma de pensar, respecto a la idea de "MEJOR", queda en "el aire" esta pregunta: ¿Ha sido, BECERRIL, el mejor de todos?

29: CESÁREO... Y BECERRIL

Por Cesáreo Suárez Naranjo

Capítulo  29

En los anteriores 28 capítulos hemos narrado la vida de MIGUEL "BECERRIL" FERNÁNDEZ (que logré recopilar de la forma más cabal posible) recorriendo - virtualmente -lo que fueron sus actuaciones en el beisbol profesional durante 14 años a partir de su llegada al equipo "Mexicali" de la Liga Arizona-Mexico en 1955 (contratado, "según parece", por un magnate de nombre "Tuffi Hassman" quien le ofreció un salario de 175 dólares mensuales, pidiendo - Becerril - 225 "grandes"), hasta 1968 - vistiendo la franela de los Pericos de Puebla - pues todo dio a entender que este gran pelotero optaba por el retiro, y que "colgaba los spikes" de una manera definitiva.

Debo reconocer que la mayor parte de la información - en cuanto a cifras exactas - la obtuve de "The Baseball Official Guide", complementada, de manera adecuada, por los libros escritos por don Raúl Mendoza y por Tommy Morales; rematando (al final de cuentas) con el Quién es Quién de la Liga Mexicana, edición 1975, publicada por Antonio Silva Vidaurry.

En cuanto a lo que hizo en las ligas invernales en que participó, tomé un poco "de aquí y de allá", incluyendo páginas de Internet; información - esta última - que tuve que depurar, pues no toda es verídica.

Según lo que sabemos al respecto, MIGUEL cogió sus "bártulos" y se vino a su amado terruño, ubicado en la región sur del estado de Veracruz: LAS CHOAPAS. Ahí, en ese rinconcito, se "echaba su cascarita" de vez en cuando. Don Augusto Palma Alor, cronista de Las Choapas (!precisamente!, y biógrafo de "cabecera" de BECERRIL) narra, en su libro, muchas de las aventuras que, fuera del terreno de juego, llevaba a cabo nuestro personaje, con un grupo de amigos, siempre aduladores.

Pero no nos atrevemos a transcribir ni siquiera una sola de esas líneas, de las muchas que don Augusto menciona (ya que lo conocía como si fuera de su familia) acerca de esas "correrías" de palomilla, porque pienso que - con todo y "todo" - su grandeza, como jugador, sobrepasaba cualquiera de sus defectos.

Becerril, ADRIANA; con su primo Pancho y su sobrina.

Así que, aquí, lo "hemos" venido recordando tal como era, pero únicamente en el terreno de juego.

Pasaron cinco años, con BECERRIL fuera del "beisbol grande". Pero ocurrió que, para 1974, la Liga Mexicana adoptó la "regla del Bateador Designado". La cual, haciendo un pequeño recorrido histórico, ya había sido probada en algunas ligas menores: la American Association, la Internacional, la Eastern, la de Texas y la Southern; las dos primeras de Triple "A", y las demás de Doble A" en 1969. (Me parece, aunque "no estoy tan seguro", que la Liga Mexicana del Pacífico lo hizo, también, en el invierno siguiente). Todo esto, hasta ser puesta en vigor por la Liga Americana, en 1973.

Esto nos lleva a recordar - fuera de contexto - que fue el legendario Connie Mack - allá, por 1906 - el primero que tuvo la idea acerca de un "décimo jugador", participando en un partido; y que años más tarde, a fines de la década de los treintas, John Heydler - presidente de la Liga Nacional - la volvía a proponer. Irónicamente, esto, pues todos sabemos que es precisamente el "viejo circuito" el que no aprobó, en su momento, la puesta en práctica de esta moción, y que sólo la acepta para los juegos interligas.

Entonces Chara Mansur, dueño de los Cafeteros de Córdoba, convenció a MIGUELÓN para que saliera de su retiro y se calzara de nuevo los spikes, a fin de que desempeñase ese rol para el equipo, que parecía "hecho a su medida".

Mansur no estaba nada contento con los resultados obtenidos por el conjunto la temporada anterior cuando - al mando de Toche Peláez - cayeron al cuarto y último sitio de la División Suroeste, con marca de 53-79, a 25 juegos de distancia de los Diablos Rojos (los que, eventualmente, obtuvieron el título), después de que en 1972 - la primera campaña de expansión, y que marcó el regreso de los Cafeteros a la Liga - habían sido campeones.

Así que se dedicó a traer más gente que ayudara a luchar nuevamente por el título. Más, al inicio de esa temporada, estos son los compañeros con los que BECERRIL se encontró: Luis Alcaraz, Arsenio "Pinolo" Rodríguez, Porfirio Ruiz, Roberto Castellón, Manny Álvarez, Wilfredo y Ramón Arano, Gener Rivero, Abel Armas, Porfirio Salomón, Pablo Gutiérrez Delfín, Justino Delfín, Jungla Salinas, etc.

 Narraremos, brevemente, algunos episodios de esa campaña. Pero eso quedará para nuestro próximo capítulo, que será - también - el final de esta historia. !Abur!

28:BECERRIL Y CESÁREO.

Por Cesáreo Suárez Naranjo

(Capítulo 28).

De la misma manera que la leyenda del resurgimiento del "ave fénix", a partir del invierno de 1966 la afición de la costa del Pacifico comenzó a ver a un "nuevo" BECERRIL FERNÁNDEZ, como si éste hubiese tomado "un segundo aire" durante el desarrollo de la Liga Sonora-Sinaloa en su temporada 1966/1967, cuando MIGUEL regresó, por quinta ocasión consecutiva a vestir la franela de los Ostioneros de Guaymas.

La campaña, que dio comienzo el 7 de Octubre, y concluyó el 12 de enero del año siguiente, vio la coronación de los Tomateros de Culiacán con los Cañeros de Los Mochis en segundo sitio. Los Ostioneros terminaron en el sexto escalón.

BECERRIL conectó un buen número de imparables: 105, 27 de los cuales fueron dobles, encabezando el circuito en ambos departamentos, y de paso imponiendo una nueva marca de hits de dos bases; que (aun cuando fue empatada por Roberto Vizcarra, en la temporada 1991/92) duró la "friolera" de 42 años, hasta que finalmente la rompió Agustín Murillo en el 2008/09 con 30 palos de dos esquinas, jugando para los Algodoneros de Ciudad Obregón.

El impulso que desde aquí tomó el muchacho de Las Choapas le alcanzó para tener su segunda mejor temporada en la Liga Mexicana, cuando menos respecto a batazos de "cuatro esquinas", en esta ocasión vistiendo una nueva franela: la de los Sultanes, dirigidos por Wilfredo Calviño, quien ya conocía a MIGUEL de cuando manejó a los Diablos Rojos, parcialmente entre 1961 y 1962.

Este equipo, el de Monterrey, contaba con muy buenos jugadores, encabezados por "el Supermán" Héctor Espino. Sus demás compañeros: Jaime Corella, Lupe Chávez, Jaime Fabela, Humberto García, Julious Grant, Evelio Hernández, Eddie Locke, Lorenzo "Carbonero" López, Urbano Luego, Rigo Mena, Goyito Ortiz, Danilo Rivas, Saul Villegas y Roberto "Bo" Castillo.

Julious Grant.

Aun con todos esos jugadores, Calviño no pudo con el "paquete". El equipo, a la deriva, quedó en el séptimo sitio de la tabla, con 60 ganados por 80 perdidos, a 25 juegos de los Charros de Jalisco.

Pero, por BECERRIL, no quedó. Con 120 imparables en 441 turnos al bat, logró un promedio de .272, con 18 dobles, 3 triples y 25 jonrones - uno, con las bases "congestionadas - anotando 59 carreras y produciendo 86. Al campo se desempeñó cubriendo la primera, segunda y tercera almohadillas y, ocasionalmente, los jardines.

Un hecho histórico que se dio, a partir de esa temporada, es que el Beisbol Organizado le confirió a la Liga la Clasificación "Triple A". El nivel de pelota que se siguió jugando fue propiamente el mismo (Y, después de la ANABE, hasta bajó). Pero hay que ver que esa categoría redundaba, cuando menos, en el beneficio de que si un jugador de este circuito fuese del interés de algún equipo de la Gran Carpa, el precio que tenían que pagar por él era más alto.

Evelio Hernández.

No tengo noticia cierta de cuál fue el rumbo exacto que tomó BECERRIL, para la temporada invernal en la liga Sonora-Sinaloa, 1967. Por indicios que me proporcionó el colega Jesús Alberto Rubio, tal parece que ya no estuvo con los Ostioneros de Guaymas quienes, dirigidos por Ronnie Camacho, obtuvieron el título, en una campaña que abarcó desde el 15 de Septiembre al 28 de diciembre, con un calendario de 94 partidos, quedando en segundo sitio los Tomateros de Culiacán.

Todo parece indicar, entonces, que se fue con los Venados de Mazatlán para, posteriormente (no sabría decir si en esa misma temporada, o al año siguiente) pasar a los Cañeros de Los Mochis.

Es, por eso, que nos enfocamos a la campaña 1968 de la Liga Mexicana, en la cual comenzó de nuevo con el equipo de Monterrey (dirigido, ahora, por Willie Miranda); pero, en un cambio por Raúl "Caballo" Ochoa, pasó a los Pericos de Puebla, donde se encontró a Tony Castaño, como mánager, y - de compañeros - a Teolindo Acosta, Ronnie Camacho, Graciano Enríquez, Roberto "Musulungo" Herrera, Alfredo Mariscal, Jesús Bustamante, Luís Meré, Román Ramos, Graciliano Parra, Armando Murillo, Luis Esma, Manuelillo López, Juan Ramón Quiroz, Julio Cruz, etc.

Willie Miranda.

Mientras que los Pericos terminaban en cuarto sitio, con marca de 72-68, a diez juegos de distancia de los Diablos Rojos (!peor les fue a los Sultanes, que quedaron en el sótano!), Miguel tuvo la que podemos considerar su peor temporada en nuestro máximo circuito, pues de las 355 veces legales que fue al plato, consiguió solamente 88 imparables, para un bajísimo promedio de .248, anotando 37 carreras y empujando 50, con 20 dobles, 3 triples y 11 cuadrangulares.

Era evidente que sus facultades habían venido a menos. Estamos seguros que así lo sintió, por lo que optó por el retiro, pese a que seguramente hubo algunos equipos que aún lo consideraban como un "imán de taquilla", y deseaban  tenerlo en sus filas. Regresaremos.-

ALÍ Y MATÍAS

Por Carlos Rodríguez Candila.

Estimado Jesús, de todos los temas simplificados pero siempre muy interesantes ocupo solo dos. Breve y sencillo.

De Casius Clay cuando en su tiempo empecé a notar que siendo el box en su esencia es un deporte como olímpico según su reglas, destaca como la habilidad de  competir primero no es lastimar físicamente al adversario, sino competir golpeando y  eludir  ser golpeado al máximo posible hace de ello una habilidad entretenida y muestra como sin llegar a la destructividad como las guerras entre diferentes o internas de mismos pueblos solo llevan a la destrucción física personal y de lo que son otros seres habitantes del lugar sean humanos como otras especies - que no se toman en cuenta ni se contemplan  sobre todo animales domésticos o incluso los no así pero conforman la ecología al devastarse sus hábitats los alteran al grado de la sofisticada tecnología de tal proceder , han o hemos hecho un desastre por la razón que se quiera tribuir y el planeta está pasando factura.

Yendo al grano Casius o  Mohamed  Alí  fue en ese llamado arte de fistiana  o como en las corridas de toros la fiesta más bella de todas las fiestas, lo sangriento está de por medio e incluso masacrar  y muchos son los ejemplos de boxeadores que por tal oficio  y cito que la mayoría de boxeadores provienen de familias oprimidas, muy pobres económicamente y casi siempre con cierto grado de analfabetismo encuentran el box una esperanza der salir de condiciones que el hambre y la miseria, más lo que notan con afición carácter, temperamento y forma de superar lo anterior sea su forma de salir y apoyar a su familia, lo lamentable es que este deporte, porque lo es, tiene una serie de personas que " se dicen promotores, representantes  y son quienes sin arriesgar nada de su integridad fisica " explotan  y se convierten en vivales que incluso se arreglan entre sí para enseñar incluso a perder.

Lamento el fallecimiento de un ser tan práctico y capaz de dominar tal capacidad que fue su fama y oficio, mas no dejo de tener dudas  de que fue un instrumento más del comercialismo  por la sencilla razón de convertirse al Islamismo que para nada respeta la política gringa  y las pruebas es lo que desde la segunda guerra mundial se ha ensañado con países donde el  islamismo o musulmanismo es objeto de credo y religión, lo que sucedió es que explotaron como en filipinas una vez a A Mohamed Alí le preguntaron porque iba a dar  sus exhibiciones a países como como áfrica o asia muy pobres si sus principios musulmanes tenían tanta pobreza  a lo que el contestara " Lucho por los pobres de mi país".

El gobierno gringo notó que era un gran importador económico  muy útil y le "perdonó su cambio como acto democrático" la libertad de hacerlo siempre y cuando contribuyera y llevara subliminal más dinero a la economía.

Se murió producto del ¿daño cerebral sufrido  producto de golpes inevitables tan severos? entre otros una fractura mandibular?

Se murió estimo personalmente porque ya tenía predisposición al Mal de Parkinson que se acentuó por su mismo oficio.

Excelente boxeador en materia de picar y volar como por sus  declaraciones de un ego natural pero más alimentado como parte del Negocio. EPD. Era bueno pero no tanto como quienes le angtecedieron en diferentes pesos  de tal deporte que requiere más control .

Segundo a ¿por dónde nos vamos?

Interesante y con interrogante lo que sucede con Matías Carrillo.

Primero porque como jugador fue extraordinario, muy completo tanto en fildeo como en bateo. No del alcance de Héctor Espino, pero un pelotero  que incluso incursó en grandes ligas .

Habrá que analizar que sucede como o porqué un  manager que  hace y lleva su equipo  a niveles tan elevados  y competentes incluso campeones o líderes  en tabla general le acontencen tales  resultados ¿o no crees, Jesús, que algo anda mal sea en directivos, dueños de equipos o del mismo Matías, cuya estructura personal puede también  ser algo que lo produce?

Esto tiene rarezas  que la afición favorita del equipo  y de todos los aficionados al deporte rey  requerimos causas y motivos que se proceda  contra con o sin voluntad de tal situación pues por el contrario, no se convierta el beisbol mexicano como lo que acontece con el futbol tan exhibido  pero bien políticamente manejado.

Hay lo dejo como dice por ahí en la opinión abierta de hermandad  y ojalá aporten pues saben más que yo. Un abrazo a Todos.

27: CESÁREO Y BECERRIL

Por Cesáreo Suárez Naranjo

(Capítulo 27).

Vinicio García.

Para desencanto de sus fieles seguidores, los Diablos Rojos "perdieron la brújula" en la temporada de 1965 (ello se vio reflejado en las taquillas; pues el año anterior, cuando lograron el título, metieron una buena cantidad de aficionados, 464,689; mientras que en esta ocasión fueron 114,000 menos).

Con más descalabros (74) que triunfos (66) los "infernales" se desbarrancaron hasta el quinto sitio de la tabla, a 16 juegos y medio de sus odiados rivales, los Tigres quienes, además, los humillaron en su compromiso "particular" (llamado, como todos sabemos, "la guerra civil") pues mientras obtenían únicamente 6 victorias, los felinos les aplicaban 14 dolorosas derrotas.

Para hacer más difíciles las cosas, los "pingos" pasaron por una racha horrible (¡la peor en su historia!) de 12 derrotas consecutivas, entre el 9 y el 20 de mayo. Todo comenzó "ese" domingo 9, en su propia casa, cuando sostendrían una doble jornada contra los Petroleros de Poza Rica.

Los capitalinos ganaron el primero, pero los veracruzanos se impusieron en el segundo. Todavía, al día siguiente, los pozarricenses ganaron nuevamente. Tan pronto terminaron, ambos equipos viajaron a la tierra del riquísimo "zacahuil", para sostener otros cuatro encuentros - entre el 11 y el 14 - que (¡obviamente!) se llevaron "los dueños de casa".

Con seis derrotas en fila, los Diablos regresaron al Seguro Social, donde entre el 15 y 17 recibieron la visita de los Sultanes de Monterrey, quienes les barrieron la serie. Y, del 18 al 20 de ese mismo mes, todavía jugando en casa, los "infernales" sufrieron otras tres derrotas, ante los Broncos de Reynosa. Total: ¡DOCE DESCALABROS CONSECUTIVOS!

El día 21 se trasladaron a la Sultana del Norte, para iniciar una nueva serie al día siguiente. Y fue ahí, ¡finalmente!, que rompieron esa mala racha, al derrotar a los regiomontanos con una pizarra apretada: cuatro carreras a tres.

"Nuestro personaje": el buen MIGUELÓN, tampoco anduvo muy acertado con el bat, ni muy "fino" con el guante.

Apareció en 121 partidos, fue a la Caja de Bateo en 391 ocasiones legales, logrando únicamente 113 imparables, de los cuales 24 fueron tubeys, 5 tribeys y solo 9 de vuelta entera - uno, con casa llena - para un promedio de .289; añadiendo a ello 66 carreras remolcadas, y 54 anotadas.

Rubén Gómez

Al campo actuó, más bien, como un "utility", alternándose entre la primera y tercera base, las paradas cortas y los jardines, cometiendo más errores de lo habitual. En fin; tanto para él, como para su equipo: ¡Una temporada para olvidar!

Como en todas las cosas que ocurren "cíclicamente", iba a llegar "el invierno" - para efectos del desarrollo del beisbol en plazas de la Costa del Pacifico. Y ahí estaba BECERRIL, una vez más en el hermoso puerto de Guaymas, para defender los "colores" de ese equipo.

Para empezar, podemos decir que la temporada de la llamada "Liga Sonora-Sinaloa" - por haber ingresado Mazatlán y Culiacán - dio comienzo el 11 de octubre de 1965, y concluyó el 16 de enero del año siguiente, obteniendo el campeonato los Yaquis de Cd. Obregón, quedando en segundo sitio los Rieleros de Empalme. Y en cuanto a su actuación personal, MIGUEL promedió .275, con 11 dobles y 9 de vuelta entera, remolcando 34 carreras al pentágono.

Se vino la temporada 1966 del principal circuito veraniego de nuestro país; pero dejamos de ver a MIGUEL "BECERRIL" FERNÁNDEZ como un "diablo rojo", pues fue transferido al Águila de Veracruz con los que - como podemos recordar - ya había jugado en 1959 y 1960.

En el equipo jarocho, dirigido por Vinicio García (mánager-jugador) tuvo de compañeros a Humberto Cid, Eusebio Elizalde, Camilo Estéviz, Guillermo Galindo, Rubén Gómez, Hayward Grant, Danny Hailing, Héctor Olguín, Luis Malpica, Héctor Urbano, Gregorio Acea, Rolando Camarero, Domingo Carrasquel, Alfonso Cisneros, René Friol, Enrique Gastélum, Eloy Gutiérrez, Jesús Lechler, Roberto Ortiz, Chucho Rosales, Pepe Ruiz, Jungla Salinas, y los veteranos Pilo Gaspar, Chuy Bustamante, Eusebio Pérez, ¡y Mario Ariosa!

Los Tigres del México - ahora dirigidos por el Chamaco Garza volvieron a obtener el título, en una temporada que se programó a dos vueltas. Y con toda esa gente a su disposición, Vinicio "batalló" en la primera parte, quedando a 10 juegos y medio del primer lugar; pero tan solo a medio juego, en la parte complementaria.

Los números de BECERRIL bajaron aún más en esa temporada, pues en 127 juegos y 431 veces al bat, solo promedió .253 con 109 imparables, de los cuales 27 fueron dobles, 4 triples y 8 cuadrangulares, con 66 carreras anotadas y 54 producidas.

¡Volveré!